Ramón Gaya. Detalle de "Boceto para la Pintura" 1986.
Lo positivo inmediato -la belleza, lo perfecto, el bien-, es siempre como un tope, es algo que, a su sola aparición, se detiene y nos detiene; lo positivo no nos lleva a ninguna parte, porque es ya de por sí, final. Lo negativo, en cambio, por terrible que pueda parecer, o incluso, ser, diríase que empieza, que inaugura, que abre vivamente algo ante nosotros; más que un horizonte, eso que abre es como un abismo, sí, pero es como un abismo... infinito, rico, repleto de bienes profundos, que, poco a poco, habrá que ir descifrando, que ir rescatando.
Ramón Gaya. De "Anotaciones e insistencias". Obra completa. Edt. Pre-Textos.
"Boceto para la Pintura"
No hay comentarios:
Publicar un comentario