BAJO EL SOL DE LA TARDE

Ramón Gaya con Eloy Sánchez Rosillo en el Museo del Prado. 1999. Foto: JB

 BAJO EL SOL DE LA TARDE

(Con Ramón Gaya)

Hace viento esta tarde, un viento frío, del norte,
pero que gira y se enmaraña a ratos. Es lo propio
de un día como éste, ya el último de enero. Y hace
a la vez mucho sol, un sol dulcísimo
que acompaña y calienta y acaricia.
Yo, en este rincón de mi terraza,
que me pone al abrigo por completo
del airazo cambiante, soy dichoso
leyendo a Ramón Gaya, mientras cae
sobre mí, bendiciéndome, lumbre mansa del cielo.
Son apenas las cinco. Me queda todavía
una hora al menos antes de que comience
a declinar y a refrescar la tarde, una hora inmensa
para seguir con las anotaciones
del Diario de un pintor, inagotable libro, prodigioso,
lleno también de sol en cada línea
—el sol de la belleza y la verdad, de la obediencia—,
oro tierno de aurora o intenso de crepúsculo,
fulgor de mediodía, por lo certero y por lo cenital.
Su viva luz sin tacha entra en mí y me ilumina
(y así sucede siempre cuando vengo a estas páginas).
Se oye el mar enojado consigo mismo; se oye el viento,
que se enreda en las copas de los árboles y suena
muy semejante al mar. En el pecho cobijo una por una
las palabras de aquel que tantos años
fue mi amigo y que hoy tan cerca siento, tan aquí.
La tarde ocurre lenta. Y todo va cumpliéndose.

ELOY SÁNCHEZ ROSILLO
(Poema inédito, escrito el día 31 de enero de 2012)